Las circunstancias de la vida se barajan según las vivencias personales y la percepción asociada a esas experiencias. Pero, ¿Qué es lo que hace que actúe adecuadamente ante el malestar? ¿Me pregunto realmente qué es lo necesario para mi cuerpo ? Saber escuchar es fundamental.

La vida actual está llena de exigencia. La crisis pasada ha podido cambiar la percepción de bienestar por la supervivencia. La supervivencia es necesaria cuando los recursos económicos escasean. Sin embargo, de ella se generalizan muchos aspectos negativos en el ceder constantemente, con el fin de cubrir las necesidades económicas en pos de la salud personal.

 El miedo a la economía es una realidad constante que sacude a personas de todos los ámbitos. No solo a la gente que dispone de recursos escasos, sino también a los que más tienen, por no perder lo que poseen. Si una persona no es capaz de saber escuchar ante las demandas de su propio cuerpo, las consecuencias a la larga pueden ser más incapacitadoras y dependientes de agentes externos que de la propia valía personal.

¿Por qué es necesario saber escuchar el cuerpo?

Imagínate que tienes una bronquitis con una tos que no se quita, imagínate que tienes que trabajar. ¿Qué supone para mí el hecho de ir a trabajar con una bronquitis? Por favor, responde a esta pregunta. Ahora imagínate que decides quedarte en casa para curarte.

Después de pensar en las dos situaciones, quiero que hagas una lista con las consecuencias que tienen en el presente y a medio-largo plazo ambas. Sería realizar dos análisis independientes de las consecuencias asociadas.

Una vez hayas terminado, quiero que te hagas dos preguntas en este orden. ¿Qué es lo que quiero realmente? Respóndete a esta pregunta antes de continuar.

Y después hazte esta otra pregunta ¿Qué es lo necesario si tengo en cuenta la importancia se saber escuchar? Una vez hayas respondido y pensado en la respuesta eres tú quien decide.

En el proceso de autoescucha es importante tener en cuenta los valores necesarios para poder tomar una decisión lo más coherente posible a mi situación. La tendencia natural de las personas es actuar según lo que realmente les gustaría hacer, eso implica actuar en cada momento según lo que son y demostrar su realidad a las otras personas.

 Pero, ¿Qué es lo que pasa cuando lo que quiero no se adapta a esa voz interior?

Es en ese momento en el que necesitamos atender a las circunstancias. Ese en el que debemos valorar si lo que nuestro cuerpo demanda está por encima de lo que nuestras responsabilidades claman. Y ahí solo hay una persona capaz de tomar una decisión valorando lo que es necesario según su estado presente, la propia persona. Ante la falta de herramientas para buscar la forma de decidir, y ante las dificultades en pos de distinguir qué es importante para mí, la psicología ofrece distintas herramientas que podrán ser útiles para enfocar el asunto de manera individual.